martes, 26 de julio de 2005

EEUU: el útero, más peligroso que las trincheras

Estados Unidos fue uno de los primeros países en legalizar el aborto, a comienzos de los años setenta. Y el balance al cabo de tres décadas es muy elocuente: más de 45 millones de fetos destruidos. Un balance muy superior al de estadounidenses muertos en todas las guerras en las que ha intervenido la Unión (1.196.000).

Todo comenzó en los primeros años setenta. El clamor a favor del amor libre, el sexo libre y la libertad individual se oía como un estruendo. Una joven del estado de Texas, llamada Norma McCorvey, denuncia que ha sido violada por un grupo de jóvenes. Se queda embarazada.

Dos abogadas, Sarah Weddington y Linda Coffee, recién graduadas por la Facultad de Leyes de la Universidad de Texas convencen a Norma (a la que llaman Roe) para que luche por abortar en vez de entregar a su bebé en adopción, que era lo que se venía haciendo antaño.

El caso fue llevado a juicio varias veces hasta llegar al Tribunal Supremo, donde se emite el fallo que legaliza el aborto en los 50 estados del país norteamericano. Mientras se litigaba el caso, la bebé que Norma McCorvey esperaba nació y fue entregada en adopción.

En 1987, la misma Norma admitió que no había sido violada y que el padre de su hija era una persona conocida. El relato sobre los pandilleros resultó ser una mentira.

(Extractado de un artículo de Julia Urgel en Epoca)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Desgraciadamente así se escribe, en muchas ocasiones, la historia. Falseando la realidad en beneficio de intereses "torcidos".
Desde hace años, una serie de pseudo-progres han conseguido que la sociedad española tenga una costra, que insensibilice ante la cruda realidad del asesinato de miles de inocentes que mueren, no como los 11 de Guadalajara apagando un incendio, sino aún peor, luchando por sobrevivir ante el sinsentido de madres, familiares, médicos que consienten la barbarie.
La moral está dejando de tener cabida en muchos sectores sociales. La caída ha sido impresionante, y con las actuales medidas de ZP la cosa va a peor.
Lo bueno de todo esto es que ya no vale, pensar que personalmente no hecemos daño, hay que salir a la calle, escribir en la prensa, y defender los derechos individuales a la vida, a la educación, a tener clases de religión,... La época actual no permite cristianos superficiales, de medias tintas, hay que pelear, luchar por lo que pensamos que es justo. Luchar con la palabra, por supuesto, pero luchar, a toda hora.

Anónimo dijo...

Charly, Charly,

¿pero en que clase de blog se ha convertido esto?. Han entrado unos tipos largando un discurso en inglés que no lo entiende ni la madre que después de estar preñada durante no se cuantos meses los trajo al mundo. Esto es peor que Cine de Barrio. Vamos que esta es mi última visita a este engendro. Te lo juro por Snoppy, oh yeah¡

Publicar un comentario